El 28 de septiembre, se cumplen 54 años de un hecho que pone en acto, una de las ideas-fuerza que han articulado a los sectores sub-alternos (campesinos, trabajadores asalariados urbanos y rurales, sectores medios profesionales etc.), se trata de la Soberanía Popular.
Desde la Resistencia a la Conquista, las distintas rebeliones populares contra las autoridades coloniales: las rebeliones calchaquíes, las rebeliones de Tupac Amaru y Tupac Catarí, las llamadas republiquetas, verdaderos estados conformados por esclavos que se escapaban de las autoridades coloniales, la resistencia criolla a las invasiones inglesas, las revoluciones por la independencia, la lucha contra el imperio del Brasil por la liberación de la Banda Oriental, las revoluciones liberales contra la ocupación Francesa en México, hasta la batalla de la Vuelta de Obligado.
En toda esa línea histórica, la idea de soberanía subyace en esas movilizaciones populares. Soberania popular por la propia voz, en defensa de la tierra.
Es por esto que el programa Filosofía Rock, que se propone pensar conceptualmente, dentro de un espacio de comunicación y divulgación, se aborda el pensamiento sobre la Soberanía Latinoamericana y Nacional.
Es en esa línea es que vamos a recordar, pasar nuevamente por el corazón, lo ocurrido el 28 de septiembre de 1966, cuando un grupo de militantes de la resistencia peronista aterrizó un avión en Puerto Argentino, Malvinas, y desplegó siete banderas argentinas en un territorio usurpado por los ingleses desde hacía 133 años.
Ese acto, fue un acto de denuncia, contra la usurpación y también, contra un gobierno militar con discurso nacionalista, pero de hecho, entregado a los intereses ingleses y yankis y además, un hecho que señalaba el reclamo por el retorno de Perón a la Argentina y al Gobierno, como único representante de los intereses del pueblo y de la soberanía nacional.
En un solo hecho, un grupo de militantes logró poner en acto todo el significado de conceptos como soberanía popular, una idea que engloba intereses nacionales en el marco de un Estado que garantiza los derechos y el bienestar de las mayorías.
Andrés Castillo, actual delegado gremial bancario, de la Ex Caja Nacional de Ahorro y Seguros y hoy La Caja, actual Secretario Nacional Adjunto de la Asociación Bancaria, quien fue militante de la resistencia y uno de los “cóndores” protagonista del operativo, es quien describe a continuación, este hecho sin precedentes a nivel mundial.
Elizabet Vega Gron (EVG): Bienvenido Andrés Castillo A Filosofía Rock.
Andrés Castillo: Hola qué tal
EVG: ¿En qué consistió el operativo Cóndor y cuál fue el objetivo político?
AC: Bueno, el principal objetivo era reivindicar la soberanía, que era algo olvidado y escondido de la historia oficial. Vos hablabas de las luchas populares, bueno, en ese sentido te quería decir, que nosotros, desviamos un avión, aterrizamos en Malvinas y rebautizamos al puerto: “Puerto Rivero” como homenaje al primer luchador popular y defensor de la soberanía.
EVG: Era una de las preguntas que iba a hacerte, porqué eligieron la figura de Rivero como nombre…
AC: Porque fue el primero que luchó por la recuperación de la soberanía y era un hombre de pueblo, un gaucho.
EVG: Y varios de los que conformaron el operativo Cóndor, eran militantes sindicales, y de la resistencia peronista, te pregunto ¿por qué pensaron en hacer ese operativo en Malvinas como hecho político significativo?
AC: Bueno, la idea es de Dardo Cabo. En aquella época, la década del 60 hubo muchas intenciones o muchas ideas de desembarcar en Malvinas. Hasta hubo algunos compañeros que adquirieron un barco, para hacerlo en un barco. Era una cosa muy charlada, muy de café, de reuniones, hasta que algo concreto existió cuando Dardo convocó al grupo de compañeros a desembarcar en Malvinas mediante doblar el recorrido de un avión. El objetivo era reivindicar la soberanía y eso fue lo que hicimos.
EVG: Toda una aventura…porque tengo entendido que vos hasta último momento no sabías que ibas a abordar ese avión…era algo que se hablaba en los cafetines y de repente devino en realidad efectiva…
AC: Bueno, mirá, un día Dardo me comenta esto delante de otros compañeros y yo no le di mucha importancia, porque era una cosa muy charlada pero nada concreto, hasta que ese día me llaman por teléfono a la Caja de Ahorro donde yo trabajaba, y donde todavía estoy allí trabajando y me dice el compañero Rudy Fafendor: “¿Te acordás la charla que tuvimos con el flaco? Bueno, se va hoy”.
No lo podía creer, entonces traté de ubicarlo a Dardo (cosas de esa época), lo pude ubicar e iba a estar en un lugar, que era la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Munro y allí me encuentro con los compañeros que conocía y me dicen: “El flaco está en la esquina” (estaba comiendo un sandwich) y le dije: “Me enteré que te vas de viaje…”. Me dijo: “Sí, ¿querés venir? Y le respondí que sí, que por supuesto.
Pero te voy a corregir en algo, no era una aventura, era un ideal muy sentido que tanto ayer como hoy, es muy sentido por mí: es la soberanía de Malvinas. Una Tierra olvidada que para algunos liberales dicen que la Argentina tiene muchos kilómetros de tierra, que ¿para qué quieren Malvinas? Pero los intereses del imperio están por el petróleo por la salida a la Antártida, en fin…
EVG: En ese trayecto pasaron muchas cosas, incluso se encontraron en el vuelo con el Gobernador de ese momento de la Provincia de Tierra del Fuego, ¿verdad?
AC: Fue un hecho casual, por supuesto.
EVG: Y también tuvieron cobertura periodística por lo que sé…
AC: Con Héctor Ricardo García.
EVG: A quien recordamos también, era el fundador del Diario Crónica.
AC: Era el titular de Crónica, que con él, Dardo había hablado y le había pedido un fotógrafo y cuando estábamos en aeroparque aparece García y le dice: “Yo soy fotógrafo” y efectivamente él era fotógrafo y viajó él en el avión.
Pablo Rizzi: Qué tal Andrés, lo de García parece más de colado… “me hago pasar por fotógrafo, para no perderme la oportunidad”…
AC: Así es, así es…
PR: Pocas horas antes entonces del vuelo te diste por enterado de que iban a salir…
AC: Así es, pocas horas antes.
PR: ¿Y salieron de aeroparque?
AC: Sí, salimos de Aeroparque.
PR: ¿Era un vuelo comercial que salía hacia Tierra del Fuego?
AC: Era un vuelo comercial de Aerolíneas, un DC4. Nunca había sido desviado un vuelo comercial en el mundo, entonces no había ninguna forma de detectar armas.
EVG: Y vos te subiste como un ciudadano totalmente normal, con otra identidad, no había casi controles en esa época…
AC: No había ningún control. Ni siquiera te pedían documentos, vos decías cómo te llamabas…
EVG: ¿Y cómo fue todo el proceso hasta llegar a desembarcar allá? Tengo entendido que ustedes tenían planos que no eran de aviación…
AC: Te cuento, cuando el avión estaba en el lugar que suponíamos que estaba cerca de dónde teníamos que desviarlo, Dardo Cabo y el compañero Yovenco se adelantan en la parte de adelante del avión y le dicen al comandante que el avión estaba tomado, él al principio no lo creía, dos compañeros fueron a la cola del avión y le dijeron a las azafatas lo mismo, lo tomaron en broma, porque te vuelvo a repetir, nunca se había desviado un avión.
El avión, toma el rumbo 107 que es, una forma de llegar a Malvinas. Nos piden, si teníamos planos. Y Dardo, tenía unos planos que eran marítimos, no sabíamos que los planos son distintos! Y nos dicen: “Esto no me sirve porque son planos marítimos, no son aéreos” (risas) y así fuimos rumbo a Malvinas, medio a ciegas, yo me fui a la cabina de adelante y me encuentro con el problema de que las Malvinas no aparecían, estaba muy cerrado como es común en esa zona, y no sabíamos qué hacer.
Se medían las horas de vuelo con el regreso, o sea, cuando te decían que faltaban 20 minutos, faltaban 20 minutos más el regreso a Comodoro o a Río Gallegos. Así seguimos mucho tiempo hasta que el avión detecta tierra. El comandante baja del avión y encontramos una huella que ni siquiera era un camino, era una huella, y seguimos la huella que podría haber ido a cualquier lado! Pero nos llevó a lo que íbamos a bautizar como “Puerto Rivero”.
Allí aterrizamos en contra del viento (porque había muchísimo viento). La idea nuestra era carretear hasta el poblado para tomar el lugar de la comandancia de Malvinas. El avión aterrizó y se clavó en la tundra. Se acercaron algunos policías -desarmados- algunos mercenarios belgas, el dueño del bar donde se juntaba la gente también y nos pusieron unos Land Rover para que el avión no pudiera salir.
Nosotros, tomamos siete prisioneros, entre los cuales estaba el jefe de la policía y las personas estas. Te aclaro, que no opusieron resistencia ni nada. Y así fue como bajamos, cantamos el himno, Dardo fue hasta la comandancia y les dijo que se rindieran, el que estaba a cargo de la comandancia nos dijo que nos rindiéramos nosotros, y nos quedamos en el avión.
Esa noche, pasamos la noche en el avión, estuvimos en un lugar de 400 metros por 200 metros, donde había unas casamatas que eran de la Segunda Guerra Mundial. Allí nos refugiamos, estuvimos un tiempo y después nos metimos adentro del avión y ahí estuvimos hasta el día siguiente.
Al día siguiente, nos comunicamos por radio con varias radios de “radioaficionados” que transmitieron que estábamos en Malvinas y que habíamos aterrizado.
Vaya la paradoja que, mientras nosotros estábamos en Malvinas, Onganía el dictador de turno, estaba jugando al polo en la cancha de Polo de Palermo, con el Príncipe de Edimburgo. Y siguieron lo más campante, para ellos no era un tema político, ni un tema de soberanía. Era continuar con esas payasadas que hacen siempre.
Andrea Cuellar Camarena: ¿Cuál fue el momento en que vos te sentiste identificado con un sentimiento como la soberanía? ¿De chico sentiste eso? ¿Qué fue lo que te llevó a identificarte con ese sentimiento y con el peronismo?
AC: Un pensamiento macional, popular y anti-Imperialista, que lo mamé de chiquito. En eso tuvo importancia las cosas que me decía mi padre y las cosas que me enseño una maestra en segundo grado que era rosista y nos explicó lo que eran los unitarios y qué eran los federales. La famosa grieta que ya existía desde 1810 o desde antes. Te puedo decir que este tema es político pero que evidentemente, hay sentimientos.
Yo fui el primero en bajar del avión, pusimos una cuerda (yo no tenía instrucción militar, por supuesto) me agarré de la cuerda y la tuve que soltar porque me quemé las manos. Y caí con mis pies en la tierra y ahí sentí una emoción muy grande que viaja conmigo permanentemente, esa emoción es imborrable en mi vida, que ahora te lo digo y se me pone la piel de gallina…
EVG: A todos Andrés, a todos, porque quiero decirte, llevaste a la realidad esa verdad número 8 del peronismo que dice: “Primero la Patria, después el Movimiento y por último los hombres y mujeres” es admirable lo que nos estás contando.
¿Cómo fueron recibidos luego de eso en nuestro país?
AC: Nos bajaron a escondidas, como después bajaron a los soldados que fueron a Malvinas. No nos llevaron al lugar más cercano, que era Comodoro, nos llevaron a Usuahia que era un lugar muy pequeño con muy pocos habitantes y donde no iba a haber ninguna repercusión. Nos bajaron a la madrugada, del Barco Bahía Buen Suceso, un barco argentino que nos fue a buscar porque los ingleses nos querían sacar de encima y dejaron que nos juzgaran argentinos por haber luchado por la soberanía…
EVG: Bueno, pero los dejaron en evidencia…
AC: Estuvimos allí presos, yo estuve 9 meses preso con casi todos mis compañeros. Dardo Cabo estuvo dos años preso. Y yo quiero rendirle un homenaje a nuestros compañeros, muchos de los cuales fueron asesinados por la dictadura militar. Dardo estaba preso y en un invento de una fuga (inventaron la fuga) y lo mataron. A Salcedo, que lo mataron también, en la calle Oro. A Ramirez que también lo mataron.
EVG: Están presentes en nuestra memoria, ahora y siempre. Vale el homenaje para ellos.
ACC: Escuchando algunas entrevistas que te hicieron, sobre el momento tan terrible en el cual vos estuviste detenido y..
AC: Te voy a corregir, no estuve detenido, si te referís a la dictadura, estuve secuestrado, desaparecido, que no es lo mismo…Por Malvinas estuve detenido, pero por mi militancia política, estuve secuestrado y desaparecido durante dos años.
ACC: Sí, me refería a tu detención primera por el hecho de Malvinas y después, durante la dictadura estuviste secuestrado en un centro clandestino de detención. Vos pudiste tener pequeños contactos con tu familia, concretamente, con tu esposa, que te permitieron dar señales de vida. Vos estás muy orgulloso de que nunca a pesar de todas las torturas que infringieron en vos, en tu cuerpo, nunca diste alguna señal para que ninguno de tus compañeros fuera encontrado. Todas las personas que creemos que la causa que ustedes reivindicaban era una causa legítima, creemos que sos una persona que tiene una fortaleza que no sé si todas las personas la pudiésemos haber tenido. ¿Qué es lo que te mantenía firme, qué es lo que te daba fuerzas para seguir adelante en esos momentos?
AC: Bueno, que defendía una causa justa y por supuesto, que esa causa justa pasa por defender a mis compañeros. Aquellos compañeros que dependían de mí, que tenían relación directa políticamente, podían dormir tranquilos en sus casas porque yo no los iba a delatar.
EVG: Andrés quería preguntarte, volviendo como viviste luego, volviendo al tema de soberanía, siendo que habías participado en tamaña hazaña, lo que fue la Guerra de Malvinas. ¿Vos en ese momento estabas exiliado?
AC: Sí, estaba exiliado en España. Muy duro.
EVG: Esas banderas que desplegaron, actualmente siguen siendo un símbolo importantísimo en nuestro país, la gente las puede visitar. Vinieron los gobiernos de Néstor y Cristina. ¿Cómo fue después de transitar tanto dolor volver a sentir eso?
AC: Nosotros fuimos escondidos por la Historia Oficial pero Cristina, nos devolvió estar inscriptos en la historia. Nos devolvió la vida. Hizo desplegar las banderas en lugares estratégicos del país como en el Parlamento, en la Virgen de Itatí, en el Museo de Malvinas, en el mausoleo de Néstor, en la basílica de Luján.
EVG: ¿Quisiste volver alguna vez a Malvinas, sólo o con algún grupo de veteranos?
AC: Bueno, iba a volver en una oportunidad en que íbamos a firmar un acuerdo salarial, en el cual se incluía que un banco y la Bancaria, le pagaban el viaje a compañeros bancarios que fueron veteranos de Malvinas. El avión pidió la autorización para trasportarnos y lo bocharon porque viajaba yo.
EVG: Y te vetaron para siempre…
AC: El pirata nunca olvida!
EVG: ¿Qué significa para vos hoy hablar de soberanía? ¿Cuáles crees que son los desafíos para nuestro país en esa clave? Porque, vos hablaste desde el inicio de la charla, sobre los intereses en ésa región y que el gobierno anterior a éste decía que “era sólo un pedazo de tierra” y que generaba más pérdida que riquezas…
AC: Hay una política distinta, tiene que ver con el límite marítimo. Hay un proyecto de Ley que impulsa Daniel Filmus.
ACC: Andrés, escuchaba en una entrevista que te hicieron, ese momento que contás que conociste a Evita, que fue a tu escuela y la conociste a ella y a Perón y quería preguntarte si encontrás una relación entre ella y Cristina, cuando vos decís, que ella los trajo a la vida porque les dio un lugar en la historia y en la memoria de nuestro pueblo, de nuestra Patria Grande y de la historia Argentina…
AC: Hay un paralelismo entre Evita y Cristina, cada una en su tiempo, pero hay un hilo conductor que es el mismo: la defensa de los derechos de los más desposeídos y el producir hechos concretos. Evita con la fundación Eva Perón y Cristina llevando adelante una política de confrontación y enfrentamiento contra la oligarquía que impide que este pueblo salga adelante, que la gente tenga comida, que tenga casa, que tenga estudios. Como podemos ver con el problema de los chicos que no tienen conectividad y los quieren llevar a las plazas. Para que sean distintos, para que no tengan la posibilidad de tener un conocimiento y que los deja muy atrasados respecto de los colegios privados, éste es el paralelo que hay entre las dos, cada una en su momento.
PR: Tuve la oportunidad de llegar a una escuela el día que estaban entregando las computadoras de conectar igualdad y ver a los chicos a la salida sentados alrededor de los árboles, conectados, fue muy emocionante y la sensación de quien no lo vivió, era “esto debe haber pasado con Evita y la entrega de pelotas, triciclos o bicicletas” y cosas que uno creía que ya no se iban a vivir y era muy emocionante ver la cara de los chicos…
EVG: Para ir a la política y la coyuntura. Vos recién hablabas de conectividad. Hay una intención desde el gobierno de la ciudad de Buenos Aires, de sacar a la calle a los chicos más vulnerables y llevarlos al colegio, en plazas y desde el gobierno nacional, la de acercar la escuela a los chicos. Ésas son las dos visiones en disputa en la Educación. ¿Qué es lo que está en disputa en materia sindical en relación al teletrabajo, en relación a trabajadoras y trabajadores bancarios en general y en particular en la Caja de Ahorro y Seguro, en particular?
AC: El teletrabajo vino para quedarse, no hay duda. Pero tiene que ser reglamentado para que no sea una esclavitud. El trabajador, en especial, las compañeras, lo toman como una cosa correcta, porque dicen están en la casa con sus hijos, cuidándolos, se ahorran el viaje, se ahorran la plata, pero hay que tener en cuenta, que están tomando un horario que no tiene fin.
Condiciones laborales malas, porque no tienen su silla ergonométrica, porque no tiene comodidad, porque si tiene una computadora, la tiene que compartir con los hijos, porque no tiene lugar; no tiene una casa de varios ambientes, generalmente tiene la cocina, donde comen, estudian los chicos y tiene que trabajar ella o él.
Entonces, esto, evidentemente, necesita de una reglamentación fuerte. Porque, además, los vuelve no reconocibles por la estructura gremial. Vos no te ves con los compañeros, por eso es importante que tengan días de trabajo en la empresa y días de trabajo en su casa, para poder tener una relación, para que sus comisiones internas, su sindicato los pueda defender. Esta es una lucha que se va a dar en estos años, muy fuerte.
PR: Claro porque sin interacción con otros compañeros es muy difícil genera una solidaridad gremial, reconocerse con el otro…
AC: Totalmente, así es. Y donde tu problema lo podés charlar con el compañero que está al lado tuyo que va a tener problemas similares al tuyo y eso produce una unidad, que es lo que se quiere romper.
EVG: También está toda la toda la parte del salario indirecto: la luz, el gas, el agua…
AC: Pero aunque te lo paguen. Hay cosas que no te las pueden pagar. Que es el descanso.
EVG: El derecho a la desconexión…
AC: Exacto. Que pares para comer. El horario de la comida, en las casa centrales, vos dejas de trabajar y vas al restaurant o al lugar que tenés, para comer e intercambiar algunas palabras con tus compañeros o compañeras. Esto es lo que te quitan y esto se va a pagar, porque el compañero se va a sentir mal.
Una cosa es una decisión por una pandemia, en un momento determinado, corto en el tiempo, seis meses, ocho meses, un año y otra cosa es de por vida. Yo no me imagino un trabajador trabajando veinte o treinta años trabajando en su casa, no me lo imagino.
ACC: Claro, también esto que decís Andrés, de que estando en la casa, la mujeres que nos encargamos del tema de los cuidados y los chicos, hay una idea de que porque trabajas a distancia, se te va a facilitar y es mejor, es una especie de engaño, porque al contrario…
AC: Es un engaño, es un engaño.
EVG: ¿Cómo ves el gobierno de Alberto Fernández Andrés? En estos pocos meses de gestión…
AC: Difícil, difícil la situación, porque son enemigos, no son adversarios. Son enemigos, quieren destituirlo. Lo de la policía no tiene otra explicación que un adelanto de un posible golpe de Estado, que por suerte no tuvo lugar.
Porque vos no poder negociar salarios, aunque sean injustos, con una persona que está con una pistola en la cintura. Además, no podés negociar con aquellas personas que rodean la casa de Olivos que se los invita pasar a conversar con el Presidente y se niegan. Entonces ¿Qué es lo que quieren? No querían resolver el problema. Además, muchos de los cuales, los jefes, son jubilados o son personas sancionadas o exoneradas, que cobran su sueldo, es un cosa de locos esto.
Se está hablando mucho, de un Sindicato de policías. Hay gente que está a favor, hay gente que está en contra, yo me pregunto lo siguiente: es una organización armada. Vos no podés discutir con una persona que tiene una pistola en la cintura. Aparte que tiene una relación vertical con los mandos. No es un sindicato eso. ¿Quién es el delegado de un sindicato? El compañero que eligen los compañeros. Acá no, acá es el jefe de la guarnición, el jefe de la comisaría, son jefes y son los que mandan a los pobres policías al frente.
ACC: Andrés vos desde que formaste la organización de la Juventud de Trabajadores en aquél momento (NdE. Andrea se refiere a la JTP: Juventud Trabajadora Peronista) ¿Cómo lo comparas a este momento histórico con el trabajo con las luchas sindicales?
AC: Es otro momento, es otro momento, no hay duda que es otro momento. Muy distinto, del mundo, de Latinoamérica. Había revoluciones en casi todos los países o movimientos revolucionarios. No podemos analizar lo de hoy con los pensamientos e instrumentos de ayer ni lo de ayer, con los pensamientos e instrumentos de hoy. Son distintos.
ACC: Coincido, porque a veces siento que hay una lectura de las cosas que busca comparar mucho con ese momento en el cual el trabajo era muy diferente, la participación de las mujeres era diferente en los espacios laborales. Me parece que hay que buscar esas nuevas formas para entender el trabajo de hoy y pensar realmente como solucionar los problemas y enfrentar desde la lucha sindical esos problemas ¿no?
AC: Es distinto por supuesto. Nosotros estamos en una Corriente Federal de Trabajadores, pero no planteamos la separación de la CGT, lo que pedimos es la democratización de la CGT, que los trabajadores puedan elegir sus dirigentes, no que los elijan en un cuarto cerrado cuatro o cinco, sino que haya una votación de trabajadores.
EVG: Me surge preguntarte, poniéndolo en relación con lo que mencionabas como diagnóstico, respecto del desafío que tiene por delante el gobierno de Alberto Fernández y de Cristina Fernández de Kirchner, en relación a estos enemigos que están siempre gestando la división. Nosotros sabemos que es fundamental que la unidad que se gestó desde lo electoral, para el triunfo del Frente de Todos, se mantenga a lo largo de todo este tiempo… ¿No?
AC: Y sí, hay que mantenerla y hay que acrecentarla, lo que pasa es que hay sectores que buscan desde el poder dividirte. Esto es permanente, es una lucha permanente. Esto agiganta la figura de Cristina que fue la que impulsó la unidad bajándose de la candidatura de ella. Ha tenido el valor de una honestidad política tremenda. Porque no hay duda de que la que más aglutina genta es ella. Aparte la relación que tiene con los trabajadores, con los humildes es muy fuerte, muy grande y a pesar de ello se bajó. Esto me hace acordar al renunciamiento de Evita, en otras circunstancias y por otros motivos. Pero es así.
EVG: Fue un acto de grandeza de ese estilo, podía renunciar a honores, pero no a la lucha y no a lo más importante que era las necesidades de la gente…
AC: Así es.
EVG: ¿Qué mensaje le das a la juventud? Que es un sector que sigue siendo un reducto que interpela su condición presente, para pensar hacia el futuro.
AC: La solidaridad, que no hay salida individual para nadie, o nos salvamos todos o no se salva nadie. Y la solidaridad pasa por organizarnos y defender nuestras ideas, militando políticamente.
EVG: Mencionas eso de “Nadie se salva sólo” y pienso en las palabras del Papa Francisco, un Papa argentino con un mensaje de solidaridad muy importante que está dando. ¿Cómo interpretás esa figura?
AC: Bueno, es una figura, que realmente sorprendió, por lo menos, a mí me sorprendió. Reconozco dos cosas en él: una gran honestidad que la abarca con los hechos, dando mensajes permanentemente a favor de la solidaridad, del acompañamiento de las políticas, a pesar de su cargo religioso, es un peronista. No hay duda de eso.
EVG: Gracias Andrés por el tiempo, por esta entrevista.
ACC: Gracias Andrés sentimos mucha admiración.
PR: Gracias Andrés, esperamos poder recibirte en nuestra radio.
AC: Gracias, me sentí muy cómodo con ustedes.