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Coincidiendo con el 24° aniversario de la sanción de la Constitución de 1949, que consagró los derechos sociales y consolidó la soberanía popular, el 11 de marzo de 1973 en las primeras elecciones con todas las fuerzas políticas, incluido el Partido Justicialista, pero aun con la perversa proscripción del propio Perón, fue electo Presidente de la Nación el Dr. Héctor J. Cámpora.

“Cámpora al gobierno, Perón al poder”

La proscripción de Juan Domingo Perón como candidato a Presidente lo llevó a él mismo a definir a quién encabezaría la fórmula presidencial representando al Frente Justicialista de Liberación que encabezaba el peronismo.

Eligió a sus candidatos: Héctor José Cámpora y Vicente Solano Lima. El 15 de diciembre de 1972 fue proclamada la fórmula bajo la consigna “Cámpora al gobierno, Perón al poder”.

El Partido Radical presentó la dupla Balbín-Gamond con la aspiración de poder capitalizar el voto antiperonista en una segunda vuelta.

Perón, desde Madrid, explicaba: “Si lo he puesto a Cámpora es porque sé que es un hombre de una lealtad insobornable…”.

Para confirmar esa lealtad, Cámpora explicaba cómo entendía su candidatura: “Yo voy a llegar al gobierno en virtud de un mandato que ustedes conocen. No lo he buscado ni lo he querido pero lo he recibido modestamente y lo cumpliré con energía hasta el final en beneficio de mis compatriotas. He recibido este mandato por una condición personal que, entre otras cosas, ha caracterizado toda mi vida. Algunos lo consideran un defecto, otros, una virtud y de las más honrosas en cualquier hombre. Voy a hablarles de la lealtad, lealtad total incondicional a mi patria, lealtad total incondicional a mi Movimiento, lealtad total incondicional a mis verdaderos amigos. Considero que el más grande de ellos es el general Perón y le he sido leal durante el gobierno y desde el llano. A esa lealtad personal se suma la lealtad especial que merece un jefe”.

LIBERACIÓN O DEPENDENCIA fue el lema del lanzamiento desde San Andrés de Giles de donde era oriundo Héctor Cámpora

El 11 de marzo de 1973 el pueblo argentino pudo expresarse abriendo las puertas de par en par al retorno del general Perón: el triunfo de la fórmula Cámpora-Solano con 5.908.414 votos dio una nueva esperanza a todos los argentinos.

El Peronismo obtuvo, además, mayoría absoluta en ambas Cámaras y en casi todos los gobiernos provinciales.

Un afiche con un mensaje del general Perón empapeló las paredes de todo el país:

“Al compañero y amigo Cámpora: Tenga la plena seguridad de que junto a usted, todos nosotros, los compañeros del Movimiento Nacional Justicialista, estaremos firmes acompañándolo en la empresa de la Reconstrucción Nacional. Juan Perón”.

Queremos recordar que Héctor Cámpora tuvo que asilarse en la Embajada de México después del golpe de Estado de 1976. Allí fue acogido durante tres años durante los cuales el gobierno de la Dictadura de Jorge R. Videla no le permitió salir del país, aun conociendo la gravedad de una enfermedad que lo aquejaba. Finalmente, ante la inminencia de un desenlace fatal, autorizaron su exilio en México en donde vivió durante escasos trece meses. Falleció en Cuernavaca el 19 de diciembre de 1980 y sus restos fueron repatriados recién el 9 de diciembre de 1991.

Fuente: Instituto Nacional Juan Domingo Perón de Estudios e Investigaciones Históricas, Sociales y Políticas