El 3 de diciembre de cada año, se celebra el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, establecido en 1992 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, y representa una oportunidad para reflexionar y promover las acciones necesarias para garantizar los derechos y el bienestar de las personas con discapacidades en todos los ámbitos de la sociedad y el desarrollo.
Las personas con discapacidad incluyen a aquellas que tengan deficiencias físicas, mentales, intelectuales o sensoriales a largo plazo que, al interactuar con diversas barreras, puedan impedir su participación plena y efectiva en la sociedad, en igualdad de condiciones con las demás, según la Convención Internacional para la Protección de las Personas con Discapacidad.
Según datos publicados por Naciones Unidas, en la actualidad, la población mundial supera los siete mil millones de personas y más de mil millones de personas, aproximadamente el 15 por ciento de la población mundial, viven con algún tipo de discapacidad y el 80 por ciento vive en países en desarrollo. La información señala que las personas con discapacidad suelen tener menos oportunidades económicas, peor acceso a la educación y tasas de pobreza más altas. Además, la pandemia del COVID-19 ha afectado de manera desproporcionada en la vida de las personas con discapacidad, y ha dejado en evidencia las estructuras discriminatorias existentes.
La accesibilidad y la inclusión de las personas con discapacidad son derechos fundamentales reconocidos por la Convención; y al mismo tiempo, son las condiciones necesarias para disfrutar de otros derechos. Por lo tanto, se vuelve necesario que los Estados puedan adoptar las medidas apropiadas para eliminar las barreras y obstáculos que impiden que las personas con discapacidad participen activamente en todos los ámbitos de la sociedad.
Fuente: Mercosur