Perón volvió a la Argentina luego de años de exilio por un corto tiempo en noviembre de 1972, pero no pudo presentarse como candidato para las elecciones del 11 de marzo de 1973, porque una modificación de ley electoral se lo impedía. Sin embargo, se impuso el candidato peronista, Héctor Cámpora, cercano a los sectores juveniles.
El 20 de junio de 1973, unas dos millones de personas aguardaban en Ezeiza el retorno del líder. Por la tarde, se produjeron graves incidentes entre los sectores de la derecha sindical y los grupos juveniles que pugnaban por acercarse al palco. Hubo un violento tiroteo con un saldo de 13 muertos y 365 heridos. Ante la falta de seguridad, Perón decidió aterrizar en Morón y dirigirse al país por televisión.
El 13 de julio de 1973, Cámpora y el Vicepresidente Solano Lima, fueron forzados a renunciar por los sectores tradicionales del peronismo. Tras un confuso episodio, asumió como primer mandatario Raúl Lastiri, presidente de la Cámara de Diputados y yerno de López Rega. Lastiri convocó a elecciones presidenciales para el 23 de septiembre. Sin comicios internos, Perón decidió que su mujer, Isabel Martínez, ocupara el segundo término en la fórmula presidencial. En las elecciones se impuso la fórmula Perón-Perón por casi el 62% de los votos contra el 25% de la fórmula radical Ricardo Balbín-Fernando la Rúa.
El 12 de octubre, Perón asumió la presidencia por tercera vez. Al poco tiempo quedó evidenciado su distanciamiento de los sectores cercanos a los Montoneros al reemplazar a los gobernadores y funcionarios vinculados a ese sector del movimiento.
El punto culminante de este enfrentamiento se produjo el 1 de mayo de 1974, cuando el gobierno convocó a la Plaza para celebrar el «Día del Trabajo y la Unidad Nacional».
El 12 de junio la CGT convocó a un acto en la Plaza de Mayo para respaldar al gobierno. Perón se dirigió por última vez a sus seguidores y les dijo que cuiden las conquistas laborales porque se avecinaban tiempos difíciles. Se despidió diciendo: «Yo llevo en mis oídos la más maravillosa música que es para mí la palabra del pueblo argentino». Pocos días después, el 1º de julio moría Juan Domingo Perón. Dejaba un vació político proporcional al tamaño de su figura.
Fuente: El Historiador