Nació el 4 de agosto de 1900 en Pergamino, provincia de Buenos Aires, en el seno de una familia de inmigrantes italianos. Allí transitó su infancia entre sus actividades escolares y la tranquila vida de campo. Los estudios secundarios los realizó como pupilo en el Colegio Salesiano Pío IX, del barrio porteño de Almagro, aunque debió interrumpirlos y terminó rindiendo como alumno libre en el Colegio Nacional de Buenos Aires.
En 1918, comenzó la carrera de Medicina en la UBA e inspirado por la Reforma Universitaria, se afilió al Partido Radical, atraído por sus reivindicaciones populares y por la activa militancia radical de su padre y de su hermano Ítalo.
Cinco años después, Illia ingresó como practicante al Hospital San Juan de Dios de la ciudad de La Plata, graduándose con el título de médico en el 27. Luego de recibirse, se estableció en la ciudad cordobesa de Cruz del Eje, donde ejerció su profesión y fue bautizado el “Apóstol de los Pobres”, por su especial dedicación a los enfermos sin recursos económicos.
En 1935, asumió como senador provincial e impulsó la Ley de Reforma Agraria, aprobada por la Legislatura de Córdoba, pero rechazada en el Congreso nacional. En las elecciones de 1940, fue elegido vicegobernador de Córdoba, acompañando a Santiago del Castillo, hasta la intervención provincial en el 43 y cinco años después, asumió como diputado nacional.
Luego del Golpe de Estado contra el Juan Domingo Perón, Illia fue elegido gobernador de Córdoba, pero no llegó a asumir debido a un nuevo derrocamiento, esta vez contra Arturo Frondizi, quien había eliminado la proscripción del peronismo. José María Guido fue nombrado presidente provisional, volvió a prohibir la participación peronista en la política, disolvió el Congreso y convocó a nuevas elecciones en las que Illia resultó ganador.
En su discurso de asunción el líder radical se comprometió a luchar contra la corrupción. Luego de asumir como presidente, habilitó la participación del Partido Justicialista en los comicios, aunque la prohibición a Perón siguió en pie.
Como presidente, Arturo Illia impulsó la Ley del salario mínimo, vital y móvil y el Consejo del Salario. También, convalidó la Ley de Medicamentos, la Reforma del Sistema Hospitalario y financió obras para ampliar la red de agua potable.
En cuanto a la Educación, aumentó su presupuesto año a año y en el 64 puso en marcha el Plan Nacional de Alfabetización. En materia económica, tuvo una política de ordenamiento del sector público, de impulso a la industrialización y de disminución de la deuda pública.
El 28 de junio de 1966, se produjo un Golpe de Estado que lo obligó a abandonar el gobierno. Illia renunció a su jubilación de presidente y regresó a Cruz del Eje, donde retomó el ejercicio de la medicina. Allí murió pocos meses antes del retorno de la democracia en el 83 y de un nuevo triunfo de su partido de la mano de Raúl Alfonsín.
Fuente: Radio Perfil