Durante los primeros meses de la administración de Mauricio Macri, más de 50 trabajadores del Banco Central de la República Argentina y del Banco Provincia fueron despedidos injustamente, en un hecho que indignó y entristeció a todos los niveles de la Asociación Bancaria.
Con Sergio Palazzo al frente del sindicato, las medidas adoptadas para enfrentar tal injusticia fueron variadas, potentes y contestatarias. El plan de lucha diseñado y ejecutado por La Bancaria fue ejemplar. El organismo sindical dirigido por Palazzo reafirmó su compromiso con la defensa de los derechos laborales reivindicados a lo largo de su historia. La primera decisión fue instalar un campamento frente a la sede del Banco Central ubicada en la calle Reconquista de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Sin lugar a dudas fue una idea original y ambiciosa. Gracias a ello la visibilización de la lucha alcanzó niveles pocas veces visto en la historia gremial argentina. Se trataba de 47 empleados del Banco Central y 7 del Banco Provincia.
El gobierno de Macri a través de sus aliados en los medios hegemónicos de comunicación y redes sociales, insinuó que los empleados despedidos no eran más que “ñoquis” del Estado Nacional acumulados allí durante los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner. Ante estas injurias, el dirigente gremial bancario respondió con datos: el 80% de los despedidos estaban en planta permanente. Además, todos ellos cumplían con su horario de trabajo registrándose debidamente sin haber recibido jamás una llamada de atención.
La posición del sindicato fue firme y contundente: no habrá negociación paritaria sin reincorporaciones. A las 0:30 horas del 22 de abril del 2016 se firmó el acuerdo paritario con la cámara ABAPPRA y se confirmaron las reincorporaciones. El acampe finalizó con una celebración en la madrugada de ese viernes en la que los trabajadores, emocionados por haber recuperado sus fuentes de trabajo y por seguir siendo bancarios, festejaron el logro alcanzado.
Fuente: Libro Centenario de la Asociación Bancaria “De las primeras reivindicaciones a los logros consolidados y la historia de las seccionales”.