Un 23 de enero de 1945, mediante el Decreto N° 1440, la Secretaría de Trabajo y Previsión (con rango ministerial) a cargo del Coronel Juan Domingo Perón, proclamaba el derecho de los trabajadores a gozar de un período de vacaciones pagas.
Los trabajadores argentinos hace 78 años comenzaron a disponer de una serie de días consecutivos de vacaciones pagas y mediante un programa de acceso al turismo social, una multitud de argentinos de todas las clases sociales empezó a descubrir un país hasta ese entonces muy poco conocido.
Las medidas se dieron en el marco del proyecto de Turismo Social, el cual estuvo asentado en dos ejes centrales: la extensión de las licencias pagas por vacaciones obligatorias al conjunto de los trabajadores, primero, y el montaje mediante el ejercicio coordinado entre el Estado (Nacional y provinciales) y la Fundación Eva Perón, con asociaciones, en particular las sindicales, para garantizar “el hospedaje” a los trabajadores y facilitar el transporte a través de planes de abaratamiento de pasajes y móviles especialmente destinados al traslado de los nuevos turistas.
Las vacaciones pagas tuvieron como finalidad posibilitar el acceso de la población trabajadora a los lugares de turismo, organizado por el Estado y facilitando la construcción de hoteles y colonias de vacaciones a los servicios de bienestar y asistencia social de las asociaciones profesionales, y de las franquicias posibles en los medios de transporte.
Fuente: mundogremial.com