Un hombre cargado de historia, funcionario de gobiernos, gobernador de Buenos Aires, embajador, senador y dirigente político, fue ministro del segundo gobierno de Perón con apenas 30 años, y uno de los pocos que lo visitaron en su exilio de Puerta de Hierro.
Tenía 23 años cuando se produjo el 17 de octubre de 1945 que rescataría a Perón y daría comienzo a este movimiento. El joven porteño de clase media alta y estudiante de Economía participó en esa manifestación ya legendaria. Desde ese momento hasta el día de su muerte transitó las agitadas aguas del peronismo en un país violento, de golpes militares, luchas, proscripciones y enfrentamientos en que la democracia real estaba más declamada que en los hechos. Protagonista de muchos de esos episodios, Cafiero fue de los pocos políticos democráticos que surgieron de esa forja tan desfavorable: nunca fue funcionario de un gobierno de facto y, por el contrario, fue prisionero en dos de ellos: en 1955, tras la caída de Perón, y en 1976, cuando asumió Jorge Rafael Videla.
Cafiero nació en 1922. Fue estudiante en Ciencias Económicas de la UBA, donde se recibió en 1944 de contador público y cuatro años después se doctoró en Economía. El mismo año que se doctoró, Perón lo designó consejero económico de la Embajada en los Estados Unidos. En 1952, el entonces presidente lo integraría a su gabinete como ministro de Comercio Exterior. Fue el ministro más joven de la historia.
…Cuando Perón fue derrocado por el golpe del ‘55, estuvo un año en prisión. A pesar de la cárcel, pudo más su vocación por la política, y en 1962 empezó a ocupar cargos en el Consejo Superior del Movimiento Justicialista…
En 1987, Cafiero era diputado nacional por la oposición peronista. Cuando se produjo el levantamiento carapintada contra el gobierno radical de Raúl Alfonsín, Cafiero no dudó en saltar la barrera para expresar su respaldo al presidente constitucional y mostrarse públicamente en los balcones de la Casa Rosada..
…Antonio Cafiero fue embajador en diferentes lugares y senador nacional durante muchos años, a lo largo de los cuales hizo escuela como un político de convicciones democráticas. Pero al mismo tiempo es imposible no reconocer su lugar en el espacio de la política como uno de los forjadores de la nueva democracia argentina.
Fuente: Página 12