El segundo día del Congreso Nacional Bancario se inició con la lectura de los despachos de las distintas comisiones que se conformaron y estuvieron deliberando la jornada anterior, que serán publicadas en nuestra página web.
Correspondió luego a nuestro Secretario General realizar la clausura del XLIX Congreso, donde expresó su satisfacción de pertenecer “a una asociación del nivel intelectual, de conocimiento y también de compromiso ideológico en cada una de las letras, palabras y cada uno de los datos, en cada una de las definiciones que se han volcado en estos documentos”.
Palazzo recordó y subrayó la diferencia con el Congreso realizado hace doce años en Tanti, donde “nos enterábamos que había un interventor informante en la Bancaria y un interventor en nuestra obra social”.
¿Qué pasó en ese Congreso? Ese fue el primero, en muchos años, en el que se votaron todos los despachos por unanimidad. Porque “comprendíamos que aún con las diferencias teníamos que tener la madurez como dirigentes de priorizar la organización y teníamos que dar un ejemplo categórico y jerárquico de unidad de los trabajadores aún en la disidencia para preservar de las garras de la intervención que se venía a este sindicato”.
“A 12 años de aquel Congreso uno mira atrás y hace un análisis de qué es lo que pudo ser la Bancaria intervenida y qué es la Bancaria hoy. Y encuentra en esa sabia decisión que tomamos todos y todas ese día sirvió para poder tener hoy el sindicato que tenemos, un sindicato con un presente maravilloso porque es una organización reconocida por todos los actores de la sociedad argentina”.
Afirmó que una organización sindical no se interviene para mejorar, se la interviene precisamente para que termine de descomponer sus cuadros y que sea presa fácil el trabajador de las presiones que ejerce el poder económico y más “en una actividad como la nuestra donde siempre le tuvieron ganas al sindicato”. Cada conflicto nuestro tiene que ver con que pretenden condicionarnos. Se hace a través de los recursos cuando nos lo negaban para la obra social. los que nos negaban en el macrismo para la actividad sindical cuando nos disminuyeron la cuota solidaria y hoy “tenemos el orgullo de decir que solamente el 26% de los ingresos está atado a lo que significa la cuota solidaria y casi el 60 tiene que ver con la afiliación a la organización sindical”, señaló.
Palazzo destacó que somos un sindicato con un alto nivel de prestigio, jerarquía, reconocido y desde ese lugar tenemos una organización sana, transparente, ordenada y diversa. “Cuando hay que tomar decisiones para el bien de nuestros representados somos suficientemente maduros como seres humanos y dirigentes para preservar la unidad por sobre todas las cosas”.
Continuó reflexionando que “desde ese lugar y desde esa solidez nos damos el lujo de pensar el futuro”. Expresó su entusiasmo con el proyecto del instituto universitario donde se dictarán seminarios sobre inteligencia artificial, las carreras que versan sobre el sistema financiero, y donde se va a discutir desde el lugar de la apropiación del conocimiento la posibilidad de que la reconversión laboral pase por una discusión seria entre el empresariado y el sector sindical.
Señaló la importancia de tener una representación parlamentaria con tres diputados nacionales “más allá de que uno pueda tener algún merito personal, somos los dirigentes de la Bancaria, ponemos en valor a esta organización”.
Expresó que “hemos transitado tiempos complicados en esos cuatro años donde decidimos tomar la bandera que algunos dejaban pensando que iba a haber ocho años de macrismo. Por eso era más fácil arreglar que pelearse y a otros las banderas se les cayó en el camino, porque se agotaron. Sin embargo nosotros hemos levantado todas las banderas que se caían o se arreaban y nuestra representación excedía largamente la representación de trabajadores bancarios”.
Palazzo afirmó que “lo hicimos desde un lugar muy importante, desde el lugar del amor porque quien milita lo hace por amor. Cuántas cosas dejamos de lado nosotros y es por el amor inconmensurable de tratar de cambiar una sociedad, de tratar de cambiar para bien, para mejorar, para generar esperanza donde no la hay…”.
Recordó que el Frente de Todos se conformó porque el sujeto político destinatario de esa unidad eran los que menos tenían. “Hace falta llegar a muchos sectores de la sociedad y el desencanto a veces nos hace perder militantes y para nosotros el militante sindical político, el de cuerpo a cuerpo, el del barrio casa por casa, el del escritorio por escritorio en el caso de un bancario, es la herramienta más poderosa que tenemos para transmitir ideas. Ellos tienen los medios hegemónicos, ellos tienen el capital, pero nosotros para contrarrestar eso nuestro activo más importante es la militancia”.
Continuó señalando que “la política no es una carrera de velocidad, es una carrera de resistencia y podemos estar abatidos o caídos pero en realidad nosotros con nuestra militancia somos generadores de esperanza aún cuando la esperanza no exista. Y uno se plantea si no estuviéramos nosotros militantes para generar esa esperanza qué sería la vida sin ella sino casi un triste ensayo de la muerte. Entonces desde ese lugar es que nosotros tenemos que seguir construyendo unidad en nuestra organización y en la política”.
Fue contundente al expresar “que no le tenemos miedo al debate y a las tensiones internas en nuestra organización tampoco hay que tener ese miedo en la política. Tiene que haber un proyecto que nos unifique… Las diferencias son buenas y son sanas…”, afirmó.
Palazzo se refirió a que el año que viene tendrá lugar el 50 Congreso Nacional y un año después celebraremos los 100 años de la Asociación Bancaria desde que se le dio a la personería gremial. “Hay que celebrar el otorgamiento de la personería jurídica de la Asociación Bancaria”.
Señaló que “nosotros nos hicimos cargo de una organización sindical que tenía ciertos niveles de descomposición… teníamos una situación bastante complicada en relación con los afiliados por el tema de la obra social, con cierto desgaste desde la época de los 90 en la que muchos afiliados nos reclamaron que no estuvimos a la altura de los acontecimientos… pero veníamos de esa situación de conflicto con nuestros afiliados y explotó todo en ese 2010, voló por los aires la organización y a nosotros nos tocó reconstruirla desde las cenizas…”.
Se conmemorarán los 100 años de la organización… recordaremos las grandes luchas bancarias… y “ese testimonio lo tomamos y lo hicimos vigente en cada una de nuestras luchas porque cada vez que salimos a la calle no salimos solo nosotros militantes y los bancarios y las bancarias, salieron nuestros jubilados que hicieron la gran huelga del 59, salieron nuestros compañeros desaparecidos durante la dictadura militar, salieron nuestros mártires sindicales que no solo en la dictadura militar entregaron su vida y su sangre para que los trabajadores tengan derechos y tengan libertades y en este tiempo necesitamos apelar nuevamente a los jóvenes. Tenemos que ir a los bancos a buscar esa juventud que hoy están en los bancos que quizás por el discurso del canto de sirenas, el discurso de la antipolítica, de la extrema derecha tome un camino equivocado o quizás es tan fuerte el discurso y el nuestro tan débil que no perfora de la misma manera y que termina en una situación de apatía”.
Para finalizar pidió a los jóvenes que “trabajen firmemente para que sumemos cada vez más compañeros y compañeras a esta organización. Por eso a la totalidad de los compañeros jóvenes, mujeres, todos los colectivos que tiene hoy la Bancaria de diversidad quiero pedirles que sigamos transitando ese camino de unidad. Los invito a seguir por este sendero de lucha unidos caminando juntos”.
Parafraseando a Galeano, para un capitán el domicilio es el mar, Palazzo afirmó “que para nosotros los luchadores nuestro domicilio es la calle y es ahí donde seguramente nos vamos a encontrar marchando una y mil veces y vamos a ponernos como siempre el norte de la dignidad histórica y de los sueños de nuestros compañeros”.