La inclusión de la perspectiva de género es una decisión política consagrada en la Asociación Bancaria
Un repaso de las principales acciones en tiempos de pandemia
Con seguridad, no olvidaremos el año 2020. Habitamos y transitamos circunstancias de excepción a nivel mundial. A la crisis sanitaria, con el inconmensurable costo humano, se suma el impacto de la recesión económica a nivel mundial. Mientras convivimos con los efectos sociales, económicos y psicológicos del tiempo que nos toca, sentimos la imperiosa necesidad de redoblar esfuerzos. No es ni será fácil, pero, seguramente, nuestra acción política y militancia actual podrán recuperar la vieja porfía de la memoria de resistencia obrera que nos indica que ante la adversidad debe nacer la prepotencia de trabajo y la solidaridad por encima de todo y de todes.
Por esa razón sentimos que nuestra intervención en el marco de este congreso debe estar guiada por la convicción de aportar ideas y voluntades para producir la transformación que el país necesita después de cuatro años de haber transitado por un gobierno que hizo del despojo una política de Estado. Estamos convencides de que ese es el camino al que debemos sumar las organizaciones sindicales y todas las instituciones sensibles y comprometidas con las demandas del pueblo trabajador.
El sentido de este documento es mostrar cómo en pandemia, en medio de una de las crisis mundiales más grandes de las que se tenga recuerdo vivo, nuestra organización logró llevar a cabo distintas acciones tendientes al avance de la perspectiva de género y diversidad; propuestas que se enmarcan en una sostenida política de inclusión o, como nos gusta decir a nosotres, de “derecho a tener derechos”. Hemos dado pasos importantísimos en esa dirección. Hemos realizado actividades y construido nuevos marcos para trabajar por espacios laborales respetuosos y libres de todo tipo de violencias.
Comenzamos el año con la puesta en marcha del segundo Módulo del Programa de Actualización en “Géneros, sexualidades y disidencias en el mundo del trabajo: hacia la construcción de espacios libres de violencia” y hemos logrado concluir la totalidad del Trayecto formativo. Esta iniciativa que surgió como propuesta conjunta de la Asociación Bancaria y la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata, persiguió el objetivo de sensibilizar y capacitar a les trabajadores bancaries en la temática de género para contribuir a la consolidación de los Derechos Humanos.
En el mismo sendero el 5 de marzo del 2020, en el marco del Día Internacional de la Mujer, realizamos la primera jornada de capacitación en adhesión a la Ley Micaela, la cual establece la formación obligatoria en la temática de género y violencia contra las mujeres para todas las personas que se desempeñen en la función pública en la República Argentina. Si bien las organizaciones gremiales se encuentran exentas del alcance de la ley, la Asociación Bancaria fue el primer sindicato en el país en adherir a dicha normativa en forma voluntaria, motivado por una fuerte convicción y compromiso político con la igualdad del género, colocándonos, una vez más, a la vanguardia en la lucha por los derechos de les trabajadores bancaries y asumiendo la responsabilidad que nos asigna nuestra propia historia.
En mayo fuimos invitades desde el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidades de la Nación a formar parte del Registro Nacional de Promotoras y Promotores Territoriales de Género y Diversidad a Nivel Comunitario, el cual tiene como objetivo fortalecer la promoción comunitaria y territorial en materia de género y diversidad a nivel nacional.
Es así como comenzamos a trabajar juntamente con nuestras 53 seccionales nacionales para potenciar aún más la labor que en materia de géneros y diversidad nuestra organización viene llevando adelante de manera precursora, tanto en la divulgación y capacitación de dichas problemáticas como así también en la prevención y erradicación de las violencias por motivos de género.
En junio hemos lanzado un nuevo material que busca debatir las masculinidades en el siglo XXI con el propósito de dialogar y producir herramientas para la reflexión, en un ida y vuelta permanente con las demandas sociales de les trabajadores.
En agosto, como organización concretamos una de las acciones más trascendentales sobre inclusión de este año. A instancias de nuestro Secretario General, la Asociación Bancaria y el Banco de la Nación Argentina (BNA) firmaron el 6 de agosto de 2020 un acuerdo que establece un cupo no inferior al 1 por ciento de la totalidad del personal del banco destinado a ser ocupado por personas travestis, transexuales y transgénero. Se trata de una decisión muy importante que cambiará la vida de muchísimas personas. El mismo surgió como una iniciativa conjunta entre la Asociación Bancaria, las autoridades del banco y la directora de políticas contra la discriminación del INADI, Ornella Infante. Además del cupo laboral para la población travesti y trans, el acta establece la creación de un comité que deberá capacitar tanto al personal bancario como a clientes en el respeto de la diversidad sexual y de las identidades de género en el mundo laboral.
Desde nuestra organización debemos sentirnos profundamente orgulloses de este paso, celebrarlo y trabajar para su implementación y ampliación a todos los bancos del país. Cada vez que se toma una decisión como esta, la sociedad se vuelve más inclusiva. En definitiva, ese es el sentido último de nuestra militancia.
Finalmente, en octubre de este año se presentó en sociedad un proyecto muy ambicioso: la creación de la primera Escuela Sindical de Género del país donde la Asociación Bancaria es un actor institucional fundador. Es una escuela destinada al fortalecimiento del sindicalismo argentino, donde la capacitación en temas cruciales de la relación capital y trabajo, así como el funcionamiento de mercado de trabajo y el derecho laboral son revisitados para observar la protección y expansión de derechos en tiempos del capitalismo global y de modelos de acumulación con sesgos conservadores desde la perspectiva de género. Tiene como objetivo la construcción de espacios laborales de equidad y protección contra las violencias y de promoción de derechos y se propone consolidar un espacio interdisciplinario para la capacitación, la investigación y la promoción artístico-cultural orientada hacia la ampliación de derechos, destinada a les trabajadores del país y la región latinoamericana, especialmente a quienes tienen interés en las funciones propias de la representación sindical. Este proyecto es pionero en nuestro país y su originalidad se apoya en la articulación interinstitucional que la impulsa: Universidad Nacional de La Plata, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (CONICET), el Ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires, la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires (CIC-PBA) y la Asociación Bancaria.
En suma, no pretendemos ser exhaustivos ni enumerar todas y cada una de las iniciativas concretadas. Buscamos, en el marco de este congreso, subrayar el sentido político de lo que hacemos y por qué lo hacemos. Creemos que esta es la senda que necesitamos profundizar. Este congreso tiene un enorme desafío que es pensar cómo vamos a prepararnos para que la post pandemia encuentre a les trabajadores en las mejores condiciones posibles para resistir a los procesos de transformación en el mundo del trabajo. Para ello debemos sostenernos en lo conquistado y asumir como compromiso que los derechos humanos seguirán siendo la vara con la que midamos nuestra acción, nuestro esfuerzo y nuestro éxito.